Origen de la «tapa»
En nuestro país es costumbre servir un aperitivo acompañado con la consumición conocido como , a este consumo itinerante se le llama «ir de tapas o tapeo». Existen varias leyendas que cuentan el origen de la tapa, te las contamos a continuación.
Normalmente se suele argumentar que el origen de la tapa viene de la costumbre antigua de tapar las copas y vasos de vino en las tabernas y mesones con un trozo de pan o una rebanada de jamón, para impedir que entrasen moscas y mosquitos,o que se depositase polvo en el interior.
Existen otras teorías en función de cada época sobre el origen de esta práctica:
- Edad Media: Durante el reinado de Alfonso X el Sabio, se dice que debido a una enfermedad que padeció se vio obligado a tomar algunos sorbos de vino por prescripción facultativa, y para evitar los efectos del alcohol, tomaba pequeños bocados entre horas acompañado a la bebida. Tras recuperarse de su enfermedad, dispuso que en los mesones de Castilla se sirviera el vino acompañado de alguna ración de comida. Otra leyenda cuenta que, durante el reinado de los Reyes Católicos se obligó a los taberneros a servir una tapa acompañado con una jarra de cerveza o vaso de vino debido al gran numero de incidentes causados por los carreteros a la salida de las tabernas.
- Siglo de Oro: En la segunda mitad del siglo XVI se usaba en España el término tapa como la castellanización directa del francés «etapé», etapa, para hacer referencia al aprovisionamiento de soldados en una marcha o traslado que durase mas de un día. La «tapa» era por tanto el lugar donde los soldados se aprovisionaban.
- Siglo XIX: Una versión más popular cuenta que la tradición de las tapas viene de la necesidad de los labriegos pudieran comer algo que permitiese llegar a la hora de comer del mediodía con fuerzas para seguir trabajando, y que esta necesidad se cubría mejor si se tomaba un breve alimento acompañado con la ingesta de algo de vino.
- Siglo XX: El origen de la tapa puede haber sido en Almería según varios autores. Esa tapa consistía en una fina loncha de jamón serrano o lomo embuchado colocado en la boca de la copa del vino, con lo que se conseguía que éste no perdiera su aroma permitiendo así conversar con los amigos.
Sea cual sea su origen esta costumbre la seguimos practicando en nuestro restaurante, con lo que te esperamos con tu consumición acompañado de una tapa.